Tortillitas de bacalao
¡Me chiflan las tortillitas de bacalao! No concibo la Semana Santa sin ellas, tanto o más que sin torrijas o pestiños. Para mi están íntimamente asociadas a la niñez y a aquellas semanas santas en casa de mi abuelo, que era el que nos las hacía, a abandonar el uniforme durante una semana para sentirte como una princesa con vestido y zapatos tan bonitos que te empujaban a caminar como ingrávida para que ningún roce pudiera estropearlos; procesiones en las sillas de La Campana, competir con otros niños por la bola de cera más gorda o salvar el primer miedo de la paradoja que es pedir caramelos a alguien que lleva oculto el rostro tras un severo antifaz y que no habla; aprender que había que estar calladitos por respeto cuando pasaban nazarenos de negro y que con los de colores podíamos seguir jugando. Este es el tradicional escaparate de la confitería La Campana en Semana Santa, donde siempre exponen pasos realizados a escala junto a nazareni...